Empezando cerca de la pubertad, el momento en que los niños comienzan a cansarse es más tarde. Aunque puede parecer que necesitan menos horas de sueño, en realidad los adolescentes necesitan más de 9 horas de sueño cada noche. Desafortunadamente, la mayoría de los adolescentes no duermen las horas que necesitan.
¿Qué dificulta el sueño para los adolescentes?
Varios factores dificultan que los adolescentes duerman las horas que necesitan:
- Horario. El adolescente promedio se cansa cerca de las 11:00 p. m. y tiene que levantarse entre las 6:00 a. m. y las 7:00 a. m. para llegar al colegio a tiempo. Esto hace imposible que se consigan 9 horas de sueño. Algunos colegios de educación media han cambiado sus horarios para comenzar más tarde. Las calificaciones de los estudiantes y su desempeño atlético mejoró como resultado en estas escuelas. Al igual que sus padres, muchos adolescentes tienen agendas ocupadas. Las noches entre semana y las actividades sociales afectan el tiempo y la calidad del sueño de los adolescentes. Llegan a casa tarde y les cuesta trabajo relajarse.
- Deberes escolares. La presión para tener éxito puede ser contraproducente cuando los jóvenes sacrifican horas de sueño para realizar los deberes escolares. Después de una noche con muy pocas horas de sueño, su hijo adolescente puede ser incapaz de concentrarse en la clase y absorber material nuevo. Los adolescentes necesitan tanto trabajar como descansar para mantener su mente alerta.
- Mensajes de texto. Los teléfonos móviles son pésimos compañeros de cama, especialmente cuando se apagan a media noche. Los adolescentes pueden pensar que todos los mensajes de texto se deben contestar inmediatamente, sin importar la hora. Incluso los mensajes de texto en las primeras horas de la noche pueden afectar el sueño. Escuchar las alertas constantes de los mensajes de texto puede hacer imposible relajarse y quedarse dormido.
El sueño y la salud de los adolescentes
Al igual que los adultos, los adolescentes que no duermen lo suficiente están en riesgo de padecer una serie de problemas en la escuela y de salud, incluso:
- Depresión y baja autoestima
- Somnolencia y problemas para concentrarse
- Baja en el desempeño escolar y calificaciones
- Mal humor y problemas para convivir con la familia y amigos
- Mayor riesgo de sufrir accidentes automovilísticos
- Tendencia a comer en exceso y subir de peso
Qué pueden hacer los padres
Enséñele a su hijo adolescente maneras para pasar una buena noche de sueño. Posteriormente, sea un buen ejemplo y practique lo que dice.
- Establezca reglas respecto a la hora de dormir. Ir a la cama a la misma hora todas las noches puede facilitar que su hijo adolescente se relaje y se quede dormido. Establezca una hora para ir a la cama para su hijo, y para usted, y asegúrese de cumplirla.
- Limite las actividades nocturnas. Ponga atención a la cantidad de noches que su hijo permanece en la escuela hasta tarde o sale con sus amigos. Considere limitar la cantidad de noches entre semana que su hijo está fuera de casa más allá de la hora de la cena.
- Ofrezca ayuda con los deberes escolares. Hable con los adolescentes acerca de su carga de trabajo escolar en clase y en casa. Si tienen un semestre pesado, ayúdelos a programar sus deberes escolares y limitar otras actividades. Asegúrese que sus hijos cuenten con un lugar agradable y silencioso para estudiar.
- Establezca límites a la tecnología. Hable con su hijo adolescente acerca de los mensajes de texto. Pregunte cómo se siente cuando no contesta un mensaje de inmediato, después establezca un horario límite para los mensajes de texto. Puede hacer una regla que indique que ningún dispositivo está permitido en el dormitorio después de cierta hora.
- Promueva actividades de relajación. Cerca de una hora antes de la hora de dormir, anime a su hijo a hacer algo relajante. Esto puede ser leer un libro o tomar un baño tibio. Aliente a su hijo a explorar maneras de relajarse para que pueda dormir.
Cuándo llamar al médico
Comuníquese con el proveedor de atención médica si su hijo adolescente no está durmiendo bien y esto interfiere con la salud de su hijo o su capacidad para realizar las actividades diarias.
Referencias
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Ultima revisión 8/19/2024
Versión en inglés revisada por: Allen J. Blaivas, DO, Division of Pulmonary, Critical Care, and Sleep Medicine, VA New Jersey Health Care System, Clinical Assistant Professor, Rutgers New Jersey Medical School, East Orange, NJ. Review provided by VeriMed Healthcare Network. Also reviewed by David C. Dugdale, MD, Medical Director, Brenda Conaway, Editorial Director, and the A.D.A.M. Editorial team.
Traducción y localización realizada por: DrTango, Inc.